El Celta consiguió ayer en casa vencer al Deportivo de la Coruña con goles de Larrivey y Nolito y un penalti parado por Sergio Álvarez. De nada le sirvió al Deportivo el gol del canterano del Barça Isaac Cuenca.
El Celta consiguió ayer una valiosa victoria ante su eterno rival, el Deportivo de la Coruña. Empezó marcando muy temprano el Celta, que en el minuto 4 ya iba ganando con un gol de Nolito, en el cual después de regatear a Sidney, bate a Lux con un disparo raso. En el minuto 6 Radoja se lleva un golpe en la cabeza y vuelve al campo con un aparatoso vendaje que le daría varios problemas durante el partido. El resto de la primera parte fue dominada el Celta aunque el Deportivo intentará reaccionar.
Sería en el minuto 55 de la segunda parte cuando Cuenca marca con un disparo por bajo que supera a Sergio y empata el marcador. Se vino arriba el Celta para intentar ponerse otra vez por delante y finalmente lo consigue en el minuto 72 con un gol de Larrivey que cabecea un centro desde la esquina y que tras celebrar el gol quitándose la camiseta, recibe la correspondiente tarjeta amarilla.
El minuto 87 sería de los más importantes del partido, ya que el árbitro pitaría penalti a favor del Deportivo tras una mano en el área del central celeste Cabral, que corta un centro de Cavaleiro. La alegría le duraría poco a la afición deportivista, ya que Sergio Álvarez para el penalti convirtiéndose así en uno de los héroes del derbi gallego.
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